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170 A Pio VJI, encadenado por el tirano ., en· medio de , sus aflicciones se le dice en nuestros papeles ( 1), que hoy rige la Iglesia in partibus_. El título que ma como los demas de_ sus predecesores desde ,S. Gregorio Mag– no(*) acá de (1) Sier:io de los si.:rvos de Dios, se iguala en el parecer de algun sabio al nombre de· servil, con_;ig.e-, nuestro> liberales denigran á los que no son de su pare- , cer. Es de fé divina, que el sucesor de S. Pedro es el Supremo pastor de la iglesia; lo~ fieles todos estan come·.,. tidos á su cuidado: su prision .no le priva de este dere– cho divino. Obi;po i11 partibus no tiene grei: llamar así á Pio VH, ¿no es negar su jurisdiccion? Si como juzgo se le llama ª'í por chiste , es una befa que se hace al pastor de la iglesia en su dolorosa situacion. Pio VII apacienta el rebaño de Jesucristo por un derecho que nin-. guna pote,tad le puede substraer. Se le dice aun mas (3): "que puede disponer de las coronas y bienes tempora– les , -como del pegujar de los clérigos." Este es un sar– casmo; es la mas injuriosa irrision del poder que le con– firió Jesucristo: el Papa ~10 dispone de los bienes del _ particular. El virtuoso Pio VII (dice (4) ot~o) "jamas protegerá un tribunal de crueldad (la Inquisicion) y per· secucion." PioVII, obra(á como sus predecesores Leon I. ( r) Diccion. Cri~. burl. pág. 128~ (*! S. Gregario Mag110 fué el primero ele los Po11tlfices que principió á usar en sus Epístolas ele esta fórmula. Des-, puer le siguió Bonifacio V y sucesi'l.1amente todos los papas desde el año 6 r 8. Bibiiot. P. P. tom. 24. Pág. 1 326. Je– sucristo dixo á sus discípulos se reputasen siempre como siervos. Los apóstoles le observaron. S. Pau. Epist. ad Efes. Cap. 5.º (2) lbielem pág. '87. (3) Pág. JI6: (4) ' Red. 6 de Abril. ,.

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