BCPAM00526-5-43000000000

que fueran, se entregaban gratui– tamente a los enfermos, o bien se les adquirían cuando no las había en el dispensario. e) Comedor de niños. Atención especial merecieron los niños. Sus rostros infantiles maci– lentos, slntoma de alimentación de– ficiente, movió a emprender una campaña de suscripciones, logran– do con ella instalar un comedor gratuito para los mismos, capaz de a tender y alimenta r a un centenar de pequeñuelos nec-esitados. A ninguno de los padres que so- cuantos estén necesimdos se les acoge y da de comer, ya que el premio que Jesucristo ofrece a los "que dan de comer al hambriento" no está reservado a los buenos, sino a lodos indistintamente. Y a l hacerlo así tengo preserHe el consejo que dice : ¡..·o 11iegues el pan. al pobre, q"e de puerta en puerta llama, q"i!:á te enseñe el camino q"e habrás de seguir mañana . El da:r limosna acción es de inestimable valor, es prestar a tu Señor, y co1~ crecido interés. Distinguidas señoras y sdoritas skviendo la comida a los niños del barrio licitan para sus hijos ing resar en el comedor se le exige credencial de su filiación poHtica . Sea creyente o incrédulo, rojo o azul, de éste o de otro barrio, a todos, sin distinción, 36 d) Hogar·internado de niños. Este centro benéfico infantil se instaló en un esbelto y acogedor edificio, cedido gratuitamente por