BCPAM00501-5-38(5)000000

- 27- IlI Jesús mío, no aparres de mí tu miseri– cordia, porque no Ja haya usado hasta aquí con mis hermanos. Reconozco mi falta y por ella te pido perdón, Jesús mío. Yo te prometo ya seguir tus huella~, y como Tú ser misericordioso. ¿Quién más misericordioso que Tú? Por nosotros viniste al mundo, por nos– otros diste tu vida, por nosotros te quedaste eo la santa Eucaris11a. íltsús mío! son mis hermanos los bom· bres, somo~ todos hijos de tu Padre celestial; El nos creó: somos ms hijos¡ Tú nos redi– miste. No olvidaré ya más esto, Jesús mío. Con ellos obraré, como Tú obras con ellos, como Tú quieres que obre yo. Jesús mío, Jc:sús de mi vida, acepta estos pobrt s afectos de un corazón que te ama, que te adora, que... te pertenece por com· pleto. ¡Oh Dios y Señor mío! quién siempre te hubiera amado! quién nunca te hubiera ofcn· dido! (Práctica para este día). -Ejercer en ho· nor de Sao Antonio uoa obra de misericordia.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz