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55 t Acaso no liais sentido opreso el co1·azon y p:ilpitanle , al oir esa grito de ventura que en si lleva ondulante la expresion de mil pechos noble y pura? ¿No veis Ja multitud cuál se conmueve y eo derredor se afana, cuando al zéliro leve su lengua de metal dá la campana? ¿Qué busca en su inquietud'¿ Sabeis qué ansiar ¿Qué fuerza sobrehumana pudo arl'obar asi su fantasía? ¿Es que en su seno recibi1· intenta un genio de Belona. que allá en la lid saogl'ienta supo ceiiirse espléndida corona. y hoy ante el mundo que confuso mira, sus l.Jazaíias pregoua orlado trovador en dulce lira? No; que objeto mas allo al bueno ocupa : mirad cuál se levanta allí , donde se agrupa el pueblo que á su Dios loores canta. inmensa mole que en su faz revela ser la morada santa del que en el carro de Querubes vuela. Es la que en horas de terrible liza. azote del hispano, á polvo y á ceniza redujo en su furor impía mano ; esas naves que veis, escombros fueron que al l.Jonor castellano de mengua y de baldon ayer sirvieron. Y si hoy en la region del viento, altiva bella su frente ostenta. ¿no lanzareis un viva al que en la silla de JuLIAN se sienta ? ¿No escribireis su nombre bendecido do nunca la tormenta al piélago le arraslre del oh·ido ?