BCCSEV000XVIII-c-1372-0700000

(17) corpore mortis bujas. Esta es, oyentes , la pfimera. . atalla en que debemos observar á Verónica. En ella >» peleó contra su carne, y la venció por lá ppenitencia exterior: peleó contra. su espuitu , y ale venció: por la penitencia Ó mortif «cion inte- srior.” ¿ Pero como se sirvió de esta: armas? Con tal denuedo, con tal constancia , qu. teniendo al enemigo baxo su pie, carnem nanqu»suppeditans y cantó el triunfo sobre sí misma y sui victrig— ARTÍCULO PRIMERO. DE LA PRIMERA REFLEXIOM. Instruida desde muy jóven enla naturaleza de su carne, hecha cargo de los principios Ó medios — por: donde «renace , Ó sewrecría,-expliquémonos de este modo, é impuesta de la fuerza que toma ya criada Ó- robustecida - contra: el espíritu, vino á concluir sabiamente, que para tenerla siempre es- clava Ó. sugeta,- era preciso combatirla »en los aprincipios: de su nutricion, y obrar contra ella ya nutrida. Para conseguir aquello se sirvió. de mextraordinarios ayunos , y para esto de horribles mnaceraciones. >” $ PRIMERO DEL ARTÍCULO PRIMERO: i Señores , yo me pasimo, quando 'meditó en los e ayunos de “Verónica, é ingenuamente os digo, qué ¿ 5

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz