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deseabamos , suspirabamos ¿ anhelabamos porque viniese el dia de hablar lo que sabiamos , y callabamos no con. poca violencia de muestra voluntad. Desde el momento en que Vim. co- operando al «santo pensamiento que le dictó :el Ciélo ,: de edificar Templo 4 nuestro Soberano Dios , y habitacion decente. 4 sus humildes Esclavas , se resolvió con. una magnanimidad digna de una memoria y recompensa eterna, d que 4 expensas de sus caudales se Con- cluyese tan costosa. fabrica ; supimos con indecible gozo. y edificacion , qual era la mano bienhechora: de que el Al. tisimo. queria servirse , para. confundir con este nuevo poderoso argumento. 4 los necios que dicen: NO HAY PROVIDENCIA! Pero al tiempo que ibamos á bendecir y elogiar publicamente ú tan provida y liberal mano, ato nuestro labio el precepto que hemos observado fidelisi- ma-