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~4 via preservado de los lazos de la lengua •in:qua, de los labios factores de la mentira, y porque le ha– via dispensado para ello su especial favor á presen– cia de quantos le trataban, y asistian. ( a) ¡O exem– plar digno de nuestras atenciones , y de nuestra imi– tacion I Ved aquí , hermanos mios , una de aque– llas raras personas, que no han delinquido grave– mente con sn lengua , y que como cosa dificilisi~ ma propone el oráculo divino: (b) Ved una de aquellas almas, cuya virtud graduaba de perfecta el Apostol Santiago , coligiendolo de no haver á nadie ofendido de palabra : (e) y ved una señal ca– si indubitable de su salvacion, conforme a lo qne D avid nos afirma en su Salmo catorce; (rl) Y por ultimo , ved en todo esto manifiesto su temor a Dios , por el esmero de conservarse interior , y exteriormente sin culpa , para que juzguemos pia– dosamente de la gloria de su alma ~ puesto q1,e nos ase~nra el Espíritu Santo por el Salmista Rey, que snbirán al monte santo de la bienaventurnnza, los que fueren inocentes de m:mos , 6 en sus obras exteriores, y li111pios de cora7on, ó en Jo i1,te– rior de su conciencia. (e) A lo menos, la gloria del buen nombre , que por el alto concepto , y cré– ditos de virtt,osa, que en nuestra ln' perial Corte entre todos se ha merecido, es cierto que no le falt:t ; -pues su memoria es como la del .insto con alabanzas de su virtud; (/) tanto, qne por el mo– do con qne se expresan quantos prcgnnt dos dicen algo de su Alte1.a? _ se pudiera asegnrar ~ que fué eH'.l S(;í ora famo111"111.a , p Jrqne era n1m terr,erosa de a. ccli.~ . 1 . 1, E,cl;.19. 7. " .lDcob,3.-:?. ti P~.\I. , 4 . 3 . , J?sJl. ~3.4. / F10ved.1. 10. 7 .

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