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. 7,1 ron reprobados pot su increoulidad , y qüo por ella nos hallamos en :m lugar substitui, dos; mas no es bien que olvidemos nos ame– naza igual desastre por nuestra infidelidad, o por nuestra ingratitud, y que ella sera caus;} les restirnya Dios su perdida felic idad: potens est eni rn Deus iterum inse1'e'J'e illos. ( 1) Si; que para el Sefíor no hai accptacion de person:1s, ni distincion entre el Griego, y el Judio; porque siendo dueño de todos manifiesta fos ri– quezas de- su bond;id_, y misericordi~ con los que de corazon le rnvocan , (2) y srn excluír a pueblo, nacion, o persona algu na se com– place en todo el que le teme, y vive bien, y a este es á quien justifica, y al que salva: In om– ni gente qui ti met eum, h' operatur justitiam. acceptus est i!li. (3) Bien lo acredita la con-– version de Zozomo , celebre Principe entre los 1\/Ioros, cuya admirable reducion a n ues– tra San ta Fe con todos sus ,,asallos, y domes– ticos prov ino de la bondad con que el Señor por Jas oraciones de un San to He1miraño le concedio la succsion que deseaba, y despues por esta su piedad , y gratitud lo hi zo memo– rable en los siglos venideros. ¿ A quantos en.. tre ,,,,....,.-------....____...,_ ___ ~---- (,) Roman.11. 113. (z) Rom. 10, ,,., (3) A~or. 10, >3