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~ estos dos preciosos Gemelos CARLOS , y FE• · LIPE rt:ci procamente se han dado os uI Q 'd~ paz en d Utero rnátetno; lll qu~, ·el aQ:o, ú ocaüun de su. feli~ naGi{)Jie~to hi:rn <napo que observaron entr.e si, nos cÍi bastante fon.. damento para discurrir piadosamepte ~ favor desta verdad. Quantos remoces no asaltar@ al corazon de Rebec;i;. ¿que diversidad de funestos pensamientos no afligieron su espiritu quando advirtio la pugna que entre· si tenian los dos fetos que llevaba en sus entrañas? Collideba11.- 11,1 r in utr:ro ejus parvuli. ( 1) ¿Que de mortales congojas no pade.cio con tan Jan -como tem• prana discordia? i y que indicaba sino la que despues havian de seguir en la vida aquellos dos hermanos Esau, y Jacob, tan diversos en su suerte, como contrario~ en sus costumbresi Llego el ti empo de nacer los dos mellizos Pila– res, y Z a ra n. , y se noto~ no sin dolor de Ta.. mar su Madre", que el unQ dellos sacando pµ brazo forcejeaba al parecer por salir a luz pri• mero que su hermano; pero ~iudado el otro d_ la naturaleza vencio al hermano, y di~po ntci d )!o Dios asi nacio an tes que el qu~ a foeua de brazos intento quitarie su indispura- ~ ble