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104 seguros ,' qae asi· abundará su di vina · paz en vuestras almas: Pax multa diligenti bus liJge,n tuam: ( 1) y solicitad esta dichosa paz, si ape– teceis ser felices, pero procurad tene rla ram– bien con vuestros proximos, si deseais gozar– la de Dios. II. Todos los caminos por donde el Se– ñor viene á nosotros , y por donde vamos á el son precisamente caminos de paz: omnes semit& illius p a€ific&. (2) De aqui puede in– feri rse, que sin el la, ni nuestra orarion le se– rá grata, ni consegui rémos tampoco bien al– guno. Por el contrario, teniendola , es tarnoJ inmediatos a Dios, y dispu es tos á recebir sus beneficios. E s pu~s necesari o, que esta paz. con nuestros proximos sea con todos indi stin • tamente , pero especia l con nuestr os enemigos. 1 . El A postol San Pablo despues de per– suadirnos la praét:ica de una vi da en todo jus• tificada, nos exorta, á que con la mayor efi– cac ia pr_o~urcmos, en quanto este de nuestra parte, v1v1r en paz co n todos los hombres , o gentes de l mundo: Si fieri P?t~st , quod ex vo– bis cst cum omnz bus h'Jm1111bus paceni ha– bentes.' (3) No comprehenderí:imos bien la fuer• ------------ ----.....------- (1) Psllm. 1 ,s. r(í;. e~) Pro\' ,b. 3. 17, (J) RotNan. 1'1, ,a.

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