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7 que timos Difcipulos del mejor Maeftro avian de difputar- le á San Pedro el Summo Pontificado , fi no lo dixera el Evangelio! Ninguno fe admire de femejante ambicion, e encierra en si un gran myfterio. Permitio Dios, que eltos dos Apoltoles pretendiefíén fobervios el Primado de la Iglefia , para dexar enfeñados a los hombres , que el fummo Principado lo avia conferido a San Pedro , por fer humilde , y que lo nego a los hijos del Zebedeo, por- que fueron fobervios. Para que con efta Divina ordena- cion , quedaíle condenada en la Iglefia la fobervia: de los Hereges, y Ciímaticos , que ambiciofos han tirado fiem- pre a deltruir la Sagrada Cabeza , que legitimamente la govierna. Muchos han intentado altivos efte temerario aflumpto 5 pero tuvieron por caftigo el quedar infames, fepultando fu memoria dé maldicion en la region del ol- yido , quarido pretendian ufanos hazeríe famofos en el mundo. De dos myfteriofas piedras haze commemoracion el viejo Teftamento. La primera fue la que poftro al Gi- gante 5 y la fegunda la que derrivó la Eftatua, Y reparo, Señor, en que folo efta fegunda quedo famola en el mun- do , con tan erecidos afcenfos , que lleno el Orbe todo de lu fama : Lapis autem, qui percuferat Statuam, fatlms e mons magntts , 0? implovit univerfam terram. Y no fa- brémos el motivo de tan diverías fortunas ? Ya lo difcur- ro afsi.. La piedra de David quifo fubir ambiciofa, y diti- gió fi tiro a la Cabeza mas gigante de los hombres : Znf- xs efi lapis im fronte ejus. La otra humilde defcendio, y paró á los pies de la Efltatua : Zn pedibms. Afsi , pues, quede fublimada la que fe humiila 5 y abatida con el olvi- do, la que fobewvia fe enfalza. Porque quien tira á derri- yar una Cabeza tan grande , merece por fu altivéz el fe- vero caltigo de una perpetua infamia. Mas: no folo erró la piedra de David , en pretender fobervia , poneríe fobre * lacabeza de un Gigante , fino es que quifo fubi 4 eíte gran A Dan. cap. 2. Y. 35 1. Reg. cap. 17. Y 49: