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28) 4 el Profeta Isaías , ne cayó en un profundo pozo Jeremias , (29) fué abofeteado Micheas ante Acab, (30) y el. Bautifta dió su cuello al cuchillo. (31) - Detente á la noticia de eftos caftigos: porque tén por fixo, que ni tus piedras herirán á ese Gigan- te: ni tus brazos son baftante robuítos para so- focar á ese Leon. Mira , queno se. repetirá el milagro del Horno ; ni cerrará Dios la boca á los Leones. En una palabra , sabete , que no hay un Jonatás , que te libre de la Lanza de ese obceso Saúl, (32) á quien pretendes acometer. Mas, ¡ó Señores , que sordo vueítro Patron á eltas voces, capaces de hacer temblar las Columas "mas ro: buítas de fortaleza , no las escucha, y solo aten- toá aquellas del Evangelio : No querrais te- mer , Sc. , entra en la Pieza en que se disponia el Suplicio , y se presenta al Emperador. ¿Quién vió , Señores , á un Leon pelear contra otro Leon? A un Gigante contra otro” Gigante ?- Aun fuego querer cebarse en otro fuego ? Pues quien' tal vió , puede hacer juicio de Wenceslao , y Ne- pomuceno en: efta ocasion. Porque veria 4 un Leon: de la eftirpe'de Judá lidiar con uno de aquellos , cuyo caraéter se (23) Heron. 8 alijfup. cap.21-1ib.4. Reg. (29) Lament. 111. V.19. % leq. (30) 3. Reg.cap.22.V. 24. (31) Marc. cap.6. v.27,, (32) 1.Reg cap.18. v.19. (33) Ptov. Cap. 19. V. 12.

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