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0245) solo; que ha sabido sugerará aquel Tyráno , de quien todos juntos no pudifteis triunfar. Ea, pues; quitaos las Coronas de las Cabezas , ponerlas con vuestras Palmas á los pies de eíte Heróe , pues solo es digno de ellas ,.el que os há aventajado en valor , y fortaleza. Pero dexémos , Señores , á es- tos infelices gemir baxo el yugo ,-que no supie- ron sacudir ¿ tomemós doétrina de su” desgracia”; y volvamos á nueltro Inviéto Martyr. ¿Pensais acaso, que porque huvo salido tan glorioso , tan lleno de honór de aquel primer Combate , se sentó 4 descansar á la apacible som- bra de sus Laureles ? No cay gais en tal pensamiens to. Antes sabed , que deseoso de 2umentar la glo=- ria de Dios , andaba inquieto , y solicito de nuevos acometimientos. Efte deseo le llevó á la dificil Conquifta de la Ciudad de Praga: ¡Eftaba sel Principe de las» Tinieblas , en quasi pacifica posesion de efta Corte. La gata , la embriaguéz, la torpeza , y los vicios todos tocaban yá á lo Summo. Reynaba Wenceslao , y efta era su mayor -desgracia: porque. corrompida la cabeza, se der- rama el daño á todo el cuerpo. Authorizados los yicios, hicieron tan rápidos progresos ; “que:rotos los Diques del desorden inundaron la Capital, qual impetuosa avenida. Del 'Frono baxó la corrup- cion al Palacio, de aqui se comunicó 4*los Cor- tesanos , de eftos al Vulgo , hafta sumergir á Pra- ga en un pielago de iniquidad ; pudiendo decirse de Wenceslao, lo que de Antioco el Texto Sacro : ; Et