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-1 + ca fe foo tras el oro , ni fo,o fos efperanzas en la pecunia , ni cheíoros; p ~ro ad~i~r– to, que poco d efputs pregunta el E(p1ncu Santo: quien fera efic Varon tan Gng ular, y le tributaremos gloriofos apl-.aufos ? _(J!!_iS eft hic, & lauLibimus e:mz ? Muí admirado obfervo al E(}.>iricu Div ü10 : pero para que tanta admirac;ion ? Por ventura, no fe Iia- . Han Varones , que dc rprccien la pecu– n ia , y theforos ? Son r:2ros ; y por cf... fo pregunta ta11 admirado : !2.!!_is ejl hic , & l aiul,ibimus emn? Po rq ue íi acafo con d l:a tan íingular circun{b.ncia fe hallare algu– n o, eíl:e en fo vida frd un:1. marabilla, una admiracion , un por tento : Fecit enim mira- Idem ibid. bi/ia in vita {tt,l. Es fin duda. ; en todo , y por todo marabiHofa la vida , de quien Cu– po dcíprcciar de corazon la m oneda:luego h,viendo nudho Venerable Difunto, no falo no ido rds el oro, ni efpcrado en la pecunia, y theforos , fi no ha verlos total:.. m ente defpreciado, frra fu vida marabillo– fa , o fer~ en fo vida una marabi1la : Fecit v ,im mirabilia in )Jita flM. Es cierto, qu~ en la pobreza fue nuef– tro '!_ en erablc Difunto una rnarabilla ;pues jamas tuvo d n1'.enor apego, ni al dinero, n i a la pecunia: antes s1 , le tenia tal ho r- tor,