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(5 cho 4 toda inteligencia humanas porque si atiendo 4 lo que han dicho sobre este pun- to los SS. PP.. particalarmente S. Agustin, S. Ambrosio, y el Chrisostomo, hallo, que despues de haver apurado los colores mas vivos de la Retorica, para dibujar la alta Dignidad del Sacerdocio, en fin se dán por vencidos , y vienen 4 confesar, que esta Dignidad tan sublime, «solo cabe en la mu- da expresion de las admiraciones: y sin em- bárgo , Señor Misacantano , de ser. esta Dignidad tan-alta, que no puede alcanzar» la nuestro conocimiento , paremonos un co A reflexionar sobre este gran Dón de da liberalidad de Dios dado a nosotros , y formaremios de él, a lo menos, aquella idéa, que nos sea- posible; y para esto no puedo menos , que traer 2 la memoria aquellas palabras , que dixo Jesu Christo 4 sus Dis- cipulos , quando los ordenó. de Sacerdotes la Noche de la Cena: Hoc facite in meam nemcrationem: (9) Haced esto en me- S m | ria mía. -— En estas palabras se han fundado los ae San- if. ad Gorint. cap. LX. E MA y pi po po ie micos

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