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GRITO NONO, '3cSi· na ac u g , omoun EO:aoque,que ef~ ta todo lleno de agua, que por cfio, al In• fi rno lo llama el mifmo Dios , El\anqne de fuego. ( .AjMcal. 19, 20 ) Pues que ün~ m ofa fcra la multitud de eOe fuego,quan; do una caverna tao grande eiH toda llena e fus incendios, y 112.ma~ . Si una monta• ña grandifsima de piedra vin, o de peder. nal forrifsimo , o dedurifsimo marmol cayera en dl:e.fucgo del Infierno, al punto Ja derritiera , y la v-olviera e cenizas , co.1 mo fi fuera de cera b:anda. Pues qual fera la multitud, y tfüvidad de d\e fuego ~ Y el alma que fus incendies fufre, que dolor padeccra con fu i.ncenciio : Nadara en el golfo de fue o ta oto el alma del Pecador. al medo qr;e onda el pez en el agua. Toda •ftara oo folo:.br.. fada en dk fuego en lo exterior, ún I mbien en Jo inreriordta. a, de dlc fi.. cgo p nerrada• .Efüira, dice David,(PfaJ. 2 • 10.)ylopondra Dios al Conde ,a' , et 1110 un horno encendido. Un c:ncendi:fo Lorno, t0do lo que refpira fuego, p< 1 que es fucg;c teda en fu inte~ ior. A ísi c1 · ,ül nado dtara, no foto en lo exrcri i-, como fe ha dicbo, fino en lo · t1,;rior rambi.n , penetrado todo de el uego. .Efü: ,;uu dcfpecho mucho le abra– fara

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