BCCSEV000XVIII-c--SE-0100p9d0
eo. Hno ejua, el sceptrum exacloris ejus superasta, sie in die Madiam: Parvulus enim... el Filius dat est nobis, et factus est principatus super hume rum ejus: el vocabilur nomen ejus..... Deus fora tis. Isa. 9, 4. et 6. Considera, alma, el gran poder de nuestro Señor Jesucristo con su Cruz para vencer y des- truir el pecado con la suma perfeccion de su justicia, PUNTO PRIMERO. Considera la infame servidumbre á que había reducido á los hombres el pecado, el infivito peso que puso sobre ellos, y la dura condicion con que los trataba. Fué el hombre sublimado desde su formacion á la altisima dignidad de imágen viv de su Criador, señalado por hijo del escelsoy constituido Señor sobre todas las criaturas male- riales que formó la Omnipotencia. Pero no esli- mando como debiera estos honores, los perdió ¡odos por sa culpa, y quedó “semejante á los bru- tos; digno por ello de ser comparado con“el mas estólido jumento. El pecado que hizo apóstalas 4 los ángeles malos en el cielo, hizo tambien] re- belde al hombre en el Paraiso contra su mismo
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz