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81 enfin preparadas todas las cosas para volver á abrir la escuela, se avisó al General Suchet, y se 16 pidió que designase dia para su inaugu- racion. Este General habia destinado una parte de las rentas del arzobispado á limosnas , con las cuales se mantuvieron muchos dias cente- nares de pobres bien alimentados de arroz, ju- días, pan y vino, cuando la escasez era univer- sal, De aquel mismo fondo pues se sacó otra porcion para los precisos gastos de la Acade- mia. Señalado el dia de la instalacion, y reu- nido un concurso brillante de las personas mas distinguidas de la ciudad, del General en gele como Presidente, de los Socios, profesores y discípulos de la Academia, se leyeron varios discursos análogos á las circunstancias, se ofre- cieron diferentes premios; y el Obispo auxi- liar, nombrado Vice-presidente, habló tambien exortando á la aplicacion á los alumnos, para que imitasen á los buenos maestros nacionales y extrange»os de las escuelas antigua y moder- na, y no siguiesen el ridículo egemplo de las Churrigueras, que han dejado llenos de ma- marrachos y extravagancias nuestros templos y edificios.*Para animar mas estos útiles adelan= tamientos, ofreció y depositó un premio de dos onzas, de oro : la una para el que mejor dibu- jase un cuerpo entero de cualquier tamaño, y la otra por otros fines tambien útiles, para el 6