BCCSEV000XIX-c--se-0071000000

212 trario, hoc est quod dicimus fieri non debere, Aqui tiene V. decidida la cuestion por el sa. pientísimo Doctor de la Tglesia S. Agustin. En vista pues de que los egércitos franceses no han entrado en España persiguiendo directa y personalmente á los Obispos , y que las gran- des calamidades de esta guerra desastrosa han sido y son comunes á los Pastores y las ovejas, €” > ¿cómo con arreglo á la doctrina de los santos Li. bros explicada por S. Agustin, podrán esos Se- ñores justificar su fuga? Sites cierto que las tro. pas francesas no obran con justicia, que preten- den enriquecerse con la preciosa lana de los re- baños, que son lobos carniceros é insaciables de los caudales dela Nacion española, que no res- petan los derechos de los ciudadanos, ni el ca- | rácter inviolable de las cosas sagradas, ¿ no de- Pl biera por lo mismo: la mas activa y personal solicitud de los Obispos emplearse enteramente en consolar á los tristes, socorrer á los necesi- tados , amparar á los desvalidos, interceder por los inocentes , sacar de las cárceles y castillos á los Sacerdotes perseguidos , llamar al redil las ovejas descarriadas , reparar las ruinas del Santuario y restituirle en cuanto fuere posible y su antigua gloria ? Yo que soy el menor y mas 7 inútil de los Obispos de España, he hecho todo esto y todavía mas, ayudado de la gracia del Dj Señor. Cuando me trageron á Zaragoza, en- | TS OS pe E s A E PR A ARIAS an sp o ey a ra <o- al E Ea € mb.