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¡E y 188 su Padre que se arrepiente de haberle cedido la corona, y que la renuncia fueta un produc: to del terror que le inspiraban las circunstan- cias. Implora el apoyo de Napoleon , que en los últimos parasismos de un gobierno agoni= zante , hace pasar á Bayona toda la Familia real, y la aparta para siempre del trono excel. so de sus progenitores. Fernando VII vuelve sus derechos legítimamente adquiridos 4 su pa- dre D. Carlos, el cual renueva la renuncia por sí y sus sucesores á favor del Emperador de los Franceses. La España al fin, pasando de ma- no en mano, recibe una Constitucion y 4 José Napoleon por Monarca, que da principio á otra dinastía nueya , y recibe el jurámento de obe- diencia y fidelidad de los Magnates del reyno en Bayona. $9, Asi se acaba aquella tragedia , que hemos recorrido rápidamente para volver cuanto an- tes á nuestro asunto. Hemos dejado en Villa- viciosa al ominoso Príncipe de la Paz; y si el P. Callosa tiene un poquito mas de paciencia, sabrá su ulterior destino, y mi opinion en cuanto á su suerte. Si Napoleon le hubiera en- tregado al Consejo supremo del: reyno ,' para que se le formara su proceso y le aplicasen el castigo merecido., tanto -el primero como su' hermano José se habrian adquirido el aprecio de los Españoles; pero arrancárseles de las ma-

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