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144 y que el Obispo neque postulavit aut egit, ut saltem per aliquot dies res atque cedes sacro purgande sibi traderentur, quo nihil in his impice violationi obngxium remaneret. El otro caso pertenece tambien á la misma parroquia de Santa Engracia, la cual hallán. dose ya restablecida en unos tiempos tan cala- mitosos, 4 costa de increibles afanes, fué me mester trasladarla 4 otra parte, buscando otro edificio, y malográndose todos los gastos y obras hechas en el primero. Al Obispo se le notificó una órden del Gobierno para que pi- diese y trasladase á otra Iglesia su parroquia, porque la de las Capuchinas impedia la tor- macion de un paseo proyectado desde la calle del Coso hasta el campo, é iba á ser demolida, Hé aqui nuevos cuidados, nueva solicitud , nue» vos sacrificios de caudales para conservar a Hues ca su parroquia. Despues de muchas tentativas sobre diferentes edificios, se accedió á dar al Obispo en cambio la Iglesia y casa de los Pa- dres Cayetanos;, que estaban muy maltratadas de las bombas. Tomóse posesion solemne de aquel edificio quieta y pacificamente ante las autoridades de la ciudad, á quienes preguntó el Amizonense en voz alta ; ¿Si tenia alguno que oponer alguna cosa? Respondiéronle que no; “porque todos los Religiosos y. Clérigos re- gulares habian sido suprimidos y sacados fuera