BCCSEV000XIX-c--se-0071000000
159 el santuario de Leciñena, y en otras partes. Mas no sabian esos señores que el Auxiliar hizo las representaciones mas vigorosas al General en gefe Suchet para atajar aquellos excesos, di- ciéndole con noble osadía entre otras cosas : que si sus tropas hacian la guerra á los hombres, respetasen siquiera los templos, las imágenes de Maria Santísima y de los Santos. ¿Hubie- ran hecho ellos mas, 6 4 lo menos otro tan- to? ¿Se hubieran atrevido á hablar de esta manera á los Gefes de la mala conducta de sus solda os? Ahora cuesta poco leyantar el grito, y no se necesita mas que impudencia y ruin descaro para inerepar á un Obispo inerme y desgraciado. Pero cuando nos rodeaban los ca- ñones, y nos amenazaban los sables y las ba- yonetas, ¿quien hizo mas, repito, quien hizo otro tanto? Desígnenle, y alabarémos su zelo y su valor. ¿Quieren asimismo saber lo que se le contextó al Obispo auxiliar? Pues yo se lo referiré tambien literalmente para su confusion. « No hacemos (decian) la guerra á los tem- « plos, 4 los altares, ni á las imágenes de los « Santos, sino 4 nuestros enemigos. Estos han « hecho fortalezas para defenderse, de los tem» « plos del Tremedal, el Aguila, Leciñena, Vi- « lHamayor, Borja, Tauste y de otros Jugares; y «nos ha sido forzoso lanzarlas de aquelles po- « siciones sagradas que ya ellos habian profa-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz