BCCSEV000XIX-c--se-0071000000

- 9 biertas de nieve, sus vertientes vestidas de yer- ba y pobladas de árboles y amimales : siento deslizarse de los montes las frescas aguas que riegan los prados; y miro con placer como aprovechan las gentes las ventajas dela paz, cultivando los fecundos valles y aplicándose á ganar el pan con el sudor de su rostro. To- do me deleyta y enagena: todo eleva á mi al- ma en busca del autor de lo criado, y del da- dor de la gracia que promete gloria inmarce- sible por premio de las buenas obras. Sin pley- tos, deudas ni pretensiones, vivo contento con mi suerte; y no envidio la inquietud de los am- biciosos. Como llevo dicho ya, no esperaba respuesta á las dos cartas que escribí en Mompeller, y puesta mi confianza en el Señor gozaba este estado feliz, superior á- todas mis esperanzas, cuando el dia menos pensado llega de España un conocido mio, quien despues de haberme hablado de la boda del Rey nuestro Señor con su ilustre sobrina la Princesa del Brasil: que decia ser la conversacion del dia, añadió que traía tambien una respuesta de Fr. Manuel Mar- tinez, Mercenario calzado, á la carta que le habia dirigido desde Mompeller el Obispo au- xiliar de Zaragoza. Gracias á Dios,-le: dige, que se ha cumplido el plazo: tanto tiempo de- seado; y dándole un abrazo muy estrecho, le

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz