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1 BUE AVE TURA DE A RROCER A,Nccrologio,o.c. MELCHOR DE POBLAD URA, Los Frailes Menores Cap11ch i11os en Castilla. Bos– quejo his tórico ( 1606-7945) Madrid, 1946. PONZ,A., Viaje por Espa11a, IX,2ª ed., Madrid 1787. Tarancón • Título de la iglesia: Padre Ete rno. • Diócesis: Cuenca. • Provincia: Cuenca. • Año de fundación: 1687. • Año de construcción: 1692. • Año de dedicación de la iglesia: 1697. • Año de supresión civil: 1835. La villa de Tarancón (Cuenca), contaba a mediados de l siglo XVII con unos ochocientos vecinos. La Villa deseaba tener un convento de religiosos. En 1682 le piden eso a los trinitarios descalzos, pero el obispo de Cuenca "po r justas causas" no concedió el pe rmiso. En 1686. prueban con los mer– cedarios descalzos, quienes teniendo acordada la escritura de la fundación, el obispo y el Consejo les niegan la licencia. En aquél momento el obispo dijo que sabía que Tarancón necesitaba un convento pero que no daría pe rmiso pa ra fundar sino a los capuchinos. El 26 de abril de 1687, fue aceptada la fundación aunque no con la ca– tegoría de convento sino con la de residencia u hospicio; el presidente iba a ser el P. Miguel de Valladolid, Misionero Apostólico. Hay que recordar que estas residencias hacían un gran papel entre las Órdenes mendicantes pues a hí se hospedaba n los hermanos limosne ros. 127 de j ulio del mismo año, se toma posesión del Hospital de Nuestra Señora de la Salud, destinado para vivienda. Al día siguiente se marcaron las condiciones para funda r: la Villa dejaría a disposición de los religiosos al– gunas casas para que allí viviesen hasta que se hiciera el convento y les aten– de ría, mientras tanto, con sus limo nas. Si contribuía en hacer la mayor parte de la fábrica del convento y de la iglesia, la villa quedaría por patrona del convento. La Orden se comprome tía a escoger un sitio adecuado para el con– vento, te niendo al menos cuatro predicadores y confesores pa ra el servicio de Tarancón; además predicarían todos los años tres días en cada semana de Cuaresma. Los frai les vivieron en una casa particula r seis meses. Luego, vivieron seis años en el Hospital. Cansados de tanta espera, se decidieron a hacer el convento o dejarían la fundación porque así no podían hacer vida re– gular normal.