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788 JESUS 1.UCAS RODRIGUEí'. GARCIA Tras las obras de reparación de iglesia y convento, la iglesia se abre al culto el 4 de octubre de 1818. E l día 1 de octubre de 1820 se dicta un decreto constitucional en el que exigía 24 individuos " in sacris" de cada convento para que subsistiera. Mu– chos conventos fueron suprimidos y de esos iba a agregarse a otros para for– mar el número exigido. El de San Antonio del Prado y el de La Paciencia, los dos conventos capuchinos de la capital, subsistieron de momento. E l 12 de junio de 1820 se invita a los hermanos legos a abandonar los con– ventos, pues de "su voluntaria resti tución al siglo podrán resultar muchas ventajas a las artes, a la agricultura y al comercio" 31 . Los días 17 al 18 de enero de 1836, salieron de sus conventos las comu– nidades de San Antonio del Prado y de La Pacie ncia. Ya hemos dicho que el convento de La Paciencia era de los mayores en la Provincia de Castilla U unto a los de El Pardo, Segovia, San Antonio del Prado, y Valladolid). La Paciencia tenía en 1809 en torno a 45 frail es. Varias imágenes y cuadros fueron llevados por los franceses a otras igle– sias, a la Academia de San Fernando y a otros depósitos 32 • En el convento de La Paciencia había más de 160 cuadros, según inventario realizado en 1809 (pensemos que e ra de fundación real, y esto le posibilitaba muchos regalos de los reyes), las imágenes eran 36 en total, y entre ellas merecía atención especial: la Inmaculada de talla sobredorada de 2 varas y media, la del Santísimo Cristo y san Miguel, de 2 varas, un Cristo de marfil, más otras varias de san Francisco, san Antonio, san José, la Virgen, etc. Cuadros importantes eran uno que representaba el despojo de Cristo, de Francisco Ricci, que estaba en el alta r mayor, otro de la Inmaculada, también de Ricci, la muerte de san José de Manuel de Molina, la muerte de san Fran– cisco de Pedro de Baeza, dos de Antonio González representando la Di– vina Pastora y san Francisco, cuatro copias de Rubens y tres de Murillo 33 . Todo esto y más, estaba en aquel edificio cúbico, fuera de toda exuberancia barroca, que constituía el convento adosado a la iglesia de La Paciencia de Cristo. Suele señalarse como fecha de la exclaustración el año de 1835. Es, sin embargo, más acertado el fijarla en 1836. Bien es verdad que en verano de 1834 tuvieron lugar trágicos y san– grientos sucesos, cuyo blanco fueron los religiosos y sus conventos. Nos re– ferimos a las famosas "matanzas de frailes". Entre los capuchinos, por for- 31. Archivo General de la Nación de Venezuela, Reales Órdenes, tomo 22, folio 166. 32. Cfr. Relación del P. Eustaquio de Cervera de lo sucedido en el convenio de La Paciencia duranle la invasión francesa, en Inventario puntual, Archivo Provincial de los Capuchinos de Cas– tilla, maauscrilo, C, 65-67. 33. Cfr. Pinturas y objetos artísticos en el convenio capuchino de La Paciencia, en Archivo Ge– neral de Simancas.sección de Gracia y Justicia, legajo 1247; inventario de septiembre de 1809.