BCCSAL000585-G-29p8d000000000

bios del mundo, esos que se ocupan en escudriñar fos secretos de la naturaleza , esos inventores de nuevos sistemas que anelan el perpetuarse por medio de unos escritos llenos de impiedad y malicia? ubi sapiens? ubi scriba? ubi conquisitor- hujus seculi ? Grandes de la tierra , que fundais vuestras esperanzas enel oro y en la plata, en la opulencia y en la esplendidez , venid á presentar delante de Fr. Diego los títulos pomposos de que os lisongeaís; pero no, confundíos al ver que vuestro esplendor es muy pasagero,,- vuestra gloria se acaba, y vuestra memoria fenece aun ántes que vosotros mismos: cuando este pobrecillo estiende su ombre mas allá de la-muerte. Es ve dad que igno- ramos cuál es su destino en la eternidad; pero. si atendemos 4 sus virtudes, sin perder de vista el din cho del Espiritu Santo , que el que apartare al peca- dor del vicio, camino evidente de perdicion , se li- bertará de la eterna muerte; podemos juzgar ser su - múerte dichosa en los ojos del Señor, pretiosa incons- pectu Domini mors sanctorum ejus: mas como nuestro juicio es falible en materia tan oculta y delicada, y sabemos que el justo cas siete veces al día, que el Se- ñor descubre manchas hasta en sus mismos Ángeles, y- que en su reino nada puede entrar sin estar antes purificado como el oro en el crisol, no podemos de- jar de ofrecer sufragios. en alivio de su alma, por si el Señor hubiere hallado algo por qué afligirlo. Por tanto, nosotros que mostramos tanto afecto al difun= O, y quizás híbremos sido favorecidos de su bondad, si cónservamos alguna idea de gratitud, cristiana, "Dios en su socorro: Gran Dios, olvidad ueg "David , $us ignorancias: si como fragil ortal: os desagradó en alguua cosa; para eso in- mos la sangre de Jesucrito , victima de nues- tros pecados y mediador de nuestra reconciliacion. ¿“oido No apartes, Señor ¿ vuestra misericordia de :este “vuestro siervo fiel y e: prestad benignos oi-