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(38) fecha el testimonio , un eclesiástico fidedigno 4 quien -Encargué su averiguación , no ha pr erma otra -Alferecia: ni dolencia algtibas:: pr d - Nos consta por confesion janádiica! de se ves: «vecina de Ronda, que estando suwmaridó agonizando, -esta pena, y la de verse por su Muerte desamparada -y en indigencia con cuatro hijos,:le conduce al sepul- «ero con la fe que leemos de la Cananea; y confesán- dolo delante de Dios. postrada y abrazada con aque- llas piedras frias, le pidió al Vénerable por su nece- sidad; y repuesta algun tanto de su desconsuelo, volvió 4 su casa, y encontró á su esposo bueno, pi- diendo de comer sentado en-la cama (1). Otra buena muger de la misma ciudad , despues de haber reservado siéte dias una sola hoja de la flor de Santa María que pudo haber de las que estuvie- ron en las manos de nuestro Venerable difunto; la sembró en una maceta, y se ha presentado una ma- colla de singular hermosura, cuyos Pe y flores obran prodigios muchos. Y finalmente, despues del fallecimientd de nues- tro Venerable sé que se ha tomado testimonio. públi- co en la villa de Coria de Ja. curacion, repentina de una. muger, sorda, por solo el:,contacto: de ¡un peda- cito de hábito que estuvo also del Apostólico misio- nero con solo ¡¡nyocarlo y aplicárselo al oido (2). Y se sabe tambien por revelacion de un alma justa que su bendita lengua «quedará incorrupta en premio de nucho « ot al Señor, y: contribuyó con su wredicacion á- e otros. le alabasen; indicia que su sepuicró. como el de otro Eliseo. -N vsitaba de otro tanto tiempo y mucho mas mbiera de referic la infinidad de enfermos ¡que es- anando de dolores, de terciamas, y Otros males, mA “E ed ers PISE sión Ub + 48 Asi me do est ¡bé e or. Cura de Villaluenga. ¡E de Ñ (2) R.P. Guardian de « Miguel de Otura. 0.

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