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A e - nes de su estado y «de. suamplio: Verdad constante, del alma; justo es que para que logre su efecto , se. da suelta corre precipitado 4. su perdicion. Pero no ha 32 DOCTRINA 1lé tos, de sus fraudes en algunos contratos; pero que no se hubiese detenido 4 exáminar si velaba en la conduca ta de sus hijos: si los enseñaba la santa ley de Dios y" la doctrina de Jesucristo: si los daba buen exemploó malo: si los castigaba, ó aplaudía sus travesuras: si los alimentaba y vestia segun su clase: si amaba á su mu- ger, mirándola como á una fiel. compañera, y nO tra= tándola dura > “asperamente como a una esclava: si na= da de esto exáminara un padre de familias, ¿cumpli= ria con la obligacion del estado en que le colocó el Señor? No, amados mios. Vosotros estais viendo que éste y todos los demas hombres estan n obligados * á no omitir el exámen que n A Pero igualmente lo es, que deben averiguar no sow lo los pecados externos con-las circunstancias que log especifican y agravan, ya sea como cristianos en comun, ya como ciudadanos en particular; tambien los peca= dos internos han de ser objeto de su examen: las cul pas graves, digo, que se cometen en el alma sin inter vencion de los sentidos del cuerpy. Mas no penseis por esto que trato de hacer carnicería de las conciencias, como injustamente vocean- los hsreges Calvinistas y otros enemigos de la confesion Sacramental. No es otra cosa el eximen que un remedio de las enfermedades / e * > y / di dexe sentir un poco del cristiano relaxado , que d rien.

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