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0 SOBRE EL DESAMPARO DE DIOS, XC. 215 can fatales circunstancias qualquiera cosa le.hará cacr: dela presencia de un objeto peligroso nace un mal: pen= samiento , de, aquí un mal deseo,. se divierte .en. él yy. - últimaniente le satisface por medio.de un pecado hor» sendo: cometido ya una vez Éste, y perdida la vergiien» za, no le parece el pecado tan feo como ántes; se co- meren otros de nuevo, se forma la cadena, se hace una costumbre detestable , se engendra un acto: vicioso, Y deabí al endurecimiento del corazon ya no falta sino PO o: ou. ¿ste url: uds ly pasao ¿No parece imposible, fieless,que tan. leves -princis “pios, al parecer, conduzcan á tan: deplorable fin? Mas no es imposible , católicos, no es imposible; porque una vez desarreglada el alma, facilmente corre de una maldad. en otra. ¿Quien le hizo a David cometer s2n0$0$ | pecados, y estar tantos meses endurecido en ellos. sin tenér ni aun: remordimientos de conciencia hasta que el Profeta Nathan le habló de. parte de Dios? ¿Quién sino. una mirada poco recatada? De Ja mala vista resultó el desco , de éste el adulterio, el homicidio, el escándalo y el endurecimiento: ¿Quién llenó de torpes imaginacio- mes y. horribles pecados 4 aquellos viejos que solicitá- ron 4 la: casta Susana, sino la libertad en mirarla: sin recato? De la mirada se levantó el tropel de pensamien= tos yde aquí se encendió el deseo, resultó la solicitacion, el falso testimonio y la venganza. Y si tantos y tan mar los efectos produxo en unos ancianos la. vista.inggusir daa de una muger: castay; honesta y. recarada,¿qué