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DE LA.ETERNIDAD. 151 vuestra poderosa proteccion , procuraré demostrar el grande asunto AE: acabo. de Sespones EN k 6 ; ertr, 4 "273 2 : ie o A ; E i j PRIMERA PARTE: Yo confieso ingenuamente, nó ¿ que si pa- fa pensar cn la eternidad fuera necesario comprehender- Ja exácramente, y perfectamente definirla; no: hubie- xa yo tenido motivo de lamentarme de la infelicidad de los cristianos que-no piensan en la eternidad. Ella es --cierramente incomprehensible,. indefinible, y. supera «todo el alcance del entendimiento humano. No seria eternidad si nuestros entendimientos pudieran darnos -una' idea cabal y exácta de su interminable duracion. -Es verdad que imitando 4 los Filósofos y Teólogos de -todos los siglos , podriamos formar algunas cuentas, ál- «gunos símiles, algunas comparaciones que nos acerca- sen de algun modo á la vista de este.oceeano inmenso; “pero apénas las consideramos con un poco de atencion, vemos, con: espanto que distan infinito del objeto, que “en nada se le parecen , y que despues de haber-apura- -do.todos los :esfuerzos de la: humana: inteligencia, de- bemos corífesar nuestra pequeñez y la debilidad de nues- tros conocimientos , “y quedarnos en el mas profundo silencio asombrados y aturdidos de su incomprehensi- “bilidad. El Padre San Agústin, aquel hombre gran= -de.en virtud y sabiduría: aquel hombre 4 quien sin exí- «“geracion podemos llamar él Salomon de lá ley de gra- e

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