BCCSAL000531-F-05000000000000
237 vario, la Cruz, nuestros Tem- plos, y nuestros Tabernácu- los , todo á una voz publica los escesos de tu amor á los hombres: haz que se inflamen nuestras almas con este fuego santo que tú mismo encendis- tes sobre la tierra. No vinistes á ella á buscar justos, sino pecadores. Por ha- llar una sola Oveja descarria- da dejas á las demas solas en tu aprisco. Encontrada que es por tu solicitud pastoral la car- gas sobre tus hombros hasta ponerla en seguridad. ¡Oh ca- ridad inmensa! Si postrado co-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz