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510 Sobre el propio estado men las adviertas con singularj= dad. La primera es de hacerle con diligencia , buscando m por menor en tu interior todo aquello que puede ser ofensa de Dios, y que te guardes de no ir siempre al Confesor:con una mis- ma histeria. de pecados .y defec- tos. Sé muy bien que no se pue de estar sin coneter faltas; pero de aquellas, en las quales m.edian- te la fragilidad se apodera la ma- Jicia , debes á lo menos con al- -guna enm:erda procurar disri- -ouir el pumero , Ó mudar en al na manera la carretilla, por no -hacer un mabphabito de ir á con- fesar , sin mas examen que aque- lla sola cantinela, que se sabe de /mercoria como-un papagayo. La.otra cosa. es de estar adver- sido, de hacer tu examen con la yor seriedad y exaétitud , pare ticularmente en aquellas cosas, á las quales conoces que tienes ó mas genio Ó mas adversion; por= 1i4i4d | que
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