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- del Misionero, donde el Padre los bendice con el santo Cristo y los despide con mucha amabi- lidad. 72. En el ejercicio del cuarto día, aunque tenga que prolongarse un poco más, el Padre Misionero hará prácticamente con. los niños el examen de conciencia, poniéndose primera- mente en la presencia de Dios, pidiéndole luz y gracia para hacer bien el examen, y rezando á este fin tres Avemaríasá la Virgen Santísima. A continuación recorrerá los Mandamientos en que suelen faltar los niños, omitiendo los de- más, y les pondrá delante de la vista los pecá- dos de que son capaces, como blasfemias, mal- diciones, faltas de respeto en el templo, en la santa Misa, obediencia á sus padres, malas compañias, ver y oir cosas feas ó torpes, hur- tos, mentiras, etc., ete. Transcurrido breve espacio de tiempo en esta consideración, se forma prácticamente con ellos el dolor, por medio de alguna comparación, y se les advier- te que ellos después á solas deben extenderse por más tiempo en estos ejercicios del examen y del dolor. 73. En ciudades y pueblos en que la mali- cia se adelanta á la edad, hecha la separación 4