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tao a [y má ó dorso de la cédula, pondrá el nombre de uña religiosa difunta y de un bienhechor ó bienhe- chora insigne, empezando por las últimas que murieron, para que cada una tenga especial cui- dado de rogar á Dios por sus almas todo el año. Se ha de poner el nombre de cada una de las religiosas, en una cedulilla y otra que diga: LA SAGRADA COMUNIDAD. Estas cedulillas y las de los Santos se han de poner en dos vasos ó jarras harto capaces para entrar en ellas la mano. A un lado del Belén se coloca una mesita con un candelero y una salvilla ó azafate. 169. Congregada la Comunidad para el re- creo, cuando la Superiora quiera hacer la distri- bución, se arrodillarán delante de la mesa las dos Coristas más jóvenes y tomada la bendición, se levantan. Una de ellas sacará y desdoblará de una en una las cédulas; en primer lugar las de los nombres de las religiosas y después las de los Santos. La M. Abadesa las lee en alta voz y leídas las pone en la salvilla que tendrá la otra Corista. Esta las llevará á cada una de las reli- giosas. La nombrada ha de estar en pie con las manos juntas hasta recibir la cédula (1). En sa- liendo la cédula con el nombre de La SAGRADA COMUNIDAD todas se pondrán en pie con las ma- nos juntas hasta haberla leído. Los nombres del Santo y de la Santa, se han de poner en el Coro, de letra bien legible. En el día de estos Santos Patronos de la Comunidad, se acostumbra á ha- cerles algún obsequio y en las necesidades que sobrevengan entre año, se les debe hacer espe- cial rogativa como á Patronos y abogados del Convento. Si hay cédulas para los Confesores, pretendientas, ó para otras personas seglares, que han de ser muy contadas, se sacarán des- (1) En la distribución de obsequios para preparar la venida del Divino Niño Jesús, que se hace la primera Dominica de Ad- viento, guárdese esta misma forma.