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> O) a su interior y hacer santas obras; el día 15 de Fe- brero, después de la colación, se encienden dos velas en la testera del refectorio, colocando en medio un Crucifijo, y la Superiora da la bendi- ción acostumbrada (véase ceremonial núm. 350) durante la cual las religiosas permanecen pos- tradas. 130. D¿MINGO, LUNES Y MARTES DE QUINCUA- GÉSsIMA.—Después de Vísperas se reza en Comu- nidad la estación al Santísimo Sacramento y el acto de desagravios. Antes de Completas, si fue» re posible, se expone S. D. M. con el Sagrado Copón, y al terminar la hora de meditación, se hace la reserva en la forma acostumbrada. Pro- curen las religiosas durante estos tres días, el mayor silencio y recogimiento posible, para desagraviar al Señor de los excesos que cometen los mundanos. No habrá más recreación que la del medio día, después de la comida, 131. MIÉRCOLES DE CENIZA.—Después de Mai- tines se dice toda la Cuaresma el Himno Veni Creator, con v). y oración, pidiendo al Espíritu Santo su asistencia y luz para los Confesores y Predicadores. 132. CUARESMA MAYOR.—Como hijas del Se- rafín llegado, cuyo amor hacia la Pasión de Nues- tro Señor Jesucristo fué, tan extraordinario que mereció ser transformado en su viva imagen do- lorosa, en todos los viernes de Cuaresma se ha- rá el solemne ejercicio del Vía-Crucis en la for- ma acostumbrada, concluyendo con la adoración del Lignum-Crucis. Toda la Comunidad asiste procesionalmente, cantando de una estación á otra la Letanía de la Pasión, Óó cosa semejante. 133. Mes DE MARZO.—Siendo el glorioso Pa- triarca San José, Patrón de la Iglesia universal y Protector especial de toda la familia Seráfica, siguiendo además las vivas exhortaciones del Sumo Pontífice León XIII, de feliz memoria, en su Encíclica Quamquam pluries, deda á los 15 de Agosto de 1889, deben procurar todas las re-