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- 62— dor por la propagación de la Fe en toda latierra, á fin de que sea bendecido, amado y glorificado en todos los pueblos y naciones. _ 1927. SANTOS BERARDO Y COMPANEROS, PROTO» MÁRTIRES DE LA ORDEN DE N. P. SAN FRANCISCO.— Esta fiesta debe ser contada entre las principa- les dedicadas al culto de los Santos de nuestra Orden. A estos Bienaventurados debe la Religión Minorítica la gloria de poseer San Antonio de Pa- dua, y N. P. San Francisco quiso tuviéramos en ellos un doble modelo para nuestra vocación. Pidamos este día á estos primeros héroes her- manos nuestros, nos alcancen su espíritu de amor á la Regla y celo incansable para rogar con ardor y eficacia por las santas Misiones en- tre fieles 6 infieles. Si hay reliquia de dichos San- tos, se pone en el Altar del Coro y se adora des- pués de Vísperas en la forma acostumbrada. 128. PURIFICACIÓN DE MARIA SANTÍSIMA.—NO se olviden en este día de consagrarse á la Virgen Sacratísima, y de conmemorar tan Santo Miste- rio, recordando también el primer dolor de la Madre de Dios y Madre nuestra. Las candelas bendecidas que las religiosas reciben por la ven- tanilla del Comulgatorio, las llevan en la proce- sión y se tienen encendidas en la Misa cantada, primero hasta que termina el Evangelio y des- pués, desde la Consagración hasta después de consumir (véase ceremonial núm. 342). Dichas candelas bendecidas, quedan al simple uso de las religiosas, que deben guardarlas religiosa- mente en sus celdas para los devotos fines que intenta la Iglesia y para la hora suprema de la muerte. Cada año se devuelve la candela del año an- terior á la Sacristana. 129. CUARESMA DE LA BENDITA.—Recordan- do que N. P. San Francisco bendijo á los que practicaren este devoto ayuno, cuya bendición alcanza ciertamente á los que no pudiendo ayu- nar corporalmente se esfuerzan ea mortificar