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por Pepito Reyes 19 Pero cuando estaba ya bastante alejado, le dijo su Maestro, dando grandes gritos: —Nifio, nifio, si Nueve, no dejes de salir al campo a buscar caracoles y traérmelos, porque me gustan mucho, y hasta los dedos me chupo cuando los como. A lo cual contesté el rapaz: —Aunque no Ilueva me parete que ya encontraré caracoles para vendérselos a usted. Con esto el profesor, Ileno de alegria subié a la falsa y de- posité en la tinaja los caracolés comprados. Al siguiente dia y a la misma hora, ya estaba otra vez Eva- risto pregoOnando su mercancia junto a la casa de su Maestro, di- ciendo a grito limpio: —zZQuién me compra caracoles? —D. Lino. D. Lino, exclamé la criada—j;Caracoles otra vez! jearacoles a la puerta! —Diablo—dijo el profesor—zComo puede ser esto? Si luce en el firmamento un sol espléndido que me ha achicharrado Ia cal- va al volver de la escuela gcémo es posible que nadie haya po- dido encontrar caracoles? Y sallendo a la puerta pregunté al nifio: —Oye, pequefio: zCémo has podido hallar caracoles si no ha llovido? Esto es para mi algo extrafio. Explicamelo. 4Cdimo los has encontrado? —Metiendo el brazo en los agujeros de las paredeés hasta el codo—respondié Evaristo. —Esta bien. 2 ¥ cuanto me pides por ellos? —Los ciento cincuenta caracoles que traigo, sin ninguna ca- racola, valen echando corto, siete perricas. ~—Pues no te daré yo menos que eso. Venga lo tuyo, alla va lo mio, y tutti contenti. Y descendieron los caracoles por segunda vez al fondo de la tinaja de donde habian salido. Asi durante quince dias continuos engafié a su Maestro aquel vivo discipulo. Pero por fin empez6 a Itlamarle la atencién a D. Lino el hecho de que los caracoles al caer al fondo de la tinaja hacian siempre la misma especie de ruido; quiero decir, que el timbre de aquel sonido no cambiaba, como suels cambiar el de cualquier sdélido 0 liquido que caen en un recipiente, cuando el recipiente se va Henando. é Intrigado por esta observacién, sacé del boleiilo la caja de cerilias; encendié una, iluminé con ella el vientre de la tinaja

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