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=D — Hijo será blanco de la persecución; que una espada de dolor atravesará el pecho de María cuando Jesús sea víctima de la saña de los hombres, pero que el sacrifi- cio de Hijo y Madre revelará el secreto de los pensa- mientos de muchos. He aquí diseñado en pocas palabras el porvenir de Jesús dulcemente dormido ahora sobre el regazo de su adorada Madre. Esta sabe autorizadamente el doloroso destino que le aguarda. Pero ¿cómo podrá ser Jesús un signo de contradicción, trayendo la paz al mundo y la reconciliación de todos con Dios?.. ¿No era esperado con ansiedad?... ¿No hizo alardes desde el principio de su vida, de palabra y con sus obras, de no pretender ser competidor de ningún trono de la tierra? ¿No predi- có la verdad y el bien y pasó por la tierra sanando los enfermos y dando vida a los muertos y perdonando pe- cados y derramando beneficios?... Si, sí, todo esto es verdad, pero precisamente por éso, porque Jesús era la Verdad y el Bien derramándose amorosamente so- bre el mundo, los impíos, los de mala voluntad, los obs- tinados en el mal, los seguidores de la mentira, los in- teresados en las tinieblas, enemigos de la luz, se apar- tarían de El y no sólo se apartarían de sus caminos se- ñalando la diversidad de doctrinas y tendencias, sino que le declararían guerra a muerte y se la darían igno- miniosa, creyendo que con ella borrarían del mundo la huella de su paso y exterminarían el Evangelio de la paz y del bien. Con lo cual según la profecía del anciano Sime- ón revelaríanse las torcidas intenciones de muchos cora- zones y Jesús sería perpetuamente el signo que señala- ría-las fronteras de los elegidos y de los reprobadso.