BCCPAM000R14-4-28000000000000

si, por el contrario, permanecía bajo las aguas, era presagio de' estación húmeda, y para los viñedos se auguraba mal por- venir. Bacharach conserva todavía sus murallas mediozvales y los restos del castillo de Staleck, residencia un tiempo de los Condes palatinos. (114) Aunque el poeta apela para la cita de estos versos a utros antiguos que pone en labios de Fray Claus, existe una variante con los únicos parecidos que nos ha sido posible ha- llar, y se encuentran en un pasatiempo musical de Widtmanns, por los años 1632: Zu Klingenberg am Main, Zu Wiirzburg au dem Stein, Zu Bacharach am Rliein, Habe'ich in meinen Tagen Gar oftmals hóren sagen, Soll'n sein die besten Wein?! donde aparece sustituido el vino de Hochheim por el de Klin- genberg. (115) Los vinos del Ahr se cosechan eu la provincia de Co- blenza, y circulan en el comercio con el nombre de clarete del Ahr, distinguiéndose por su dulzura y aroma. Pero, téngase en cuenta ser todo relativo en este mundo, y que aquel vinillo queda privado de semejantes cualidades si quien lo cata es un pa- ladar español. A cualquier cosa suelen motejar de chocolate las patronas y poco basta para provocar la sensación de dul- zura en las tragaderas de un tudesco, habituadas a la cerveza y al vino del Rhin. Utilizanse también las uvas del Ahr para la fabricación de vinos espumosos. (116) No hay vino alguno tan celebrado por la poesía y el canto como los vinos del Rhin. Es uno de los principales mo- tivos de los poemas germánicos y son incontables los «Trinklie- der» que amenizan las jaranas estudiantiles y las bulliciosas re- uniones populares. Los alemanes dicen tantas y tales maravi- llas del zumo de las uvas cosechadas en las vertientes renañnas, que no puede menos de causar la compasiva hilaridad de cual- quier extranjero, especialmente si fuere español. «Los vinos Iranceses, italianos e hispanos, ha escrito Guillermo Buchner, son bebidas sans pensée, y se toman por su gusto agradable; mas cuando se bebe el vino del Rhin, convida a pensar». Es verdad. «Convida a pensar» que es muy malo, muy desagrada- ble al paladar y primo hermano del chacolí vizcaíno de la peor

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz