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a il AÑ Ú Ñ = 548= sivo durasen tanto tiempo las elecciones. En efec- to, aquella asamblea decretó las siguientes disposi- ciones: 1.” Que los Cardenales presentes aguardasen á los ausentes tan sólo diez días. 2." Que se encierren en el palacio donde mu- rió el Romano Pontífice en Cónclave (1) con un solo familiar seglar ó eclesiástico, á no ser que tuvie- sen necesidad de ser asistidos por dos. 3." Que habiten todos en comunidad, sin ha- ber pared intermedia. 4,* Que á nadie sea lícito llegar hasta donde están los Cardenales cerrados, ni recibir éstos re- cados ni esquelas, bajo pena de excomunión. 5.* Que si alguno saliese del cónclave, de no ser por causa de enfermedad, no pueda volver á entrar. 6." Que reciban los alimentos por un torno preparado al efecto. 7.* Que si no han hecho la elección á los tres días, en los cinco siguientes no se les sirva mas que un solo manjar á la comida y cena; y si tam- pogo en ellos la hubiesen verificado, continúen en adelante á pan y agua. Con tan acertadas disposiciones y otras reglas que se establecieron en adelante, se hace muy di- fícil que se prolongue mucho tiempo la elección. Algunas variaciones han sufrido estos reglamen- tos. Clemente VI permitió que hubiese tabiques de separación en lo interior del Cónclave, y modificó algún tanto el rigor en cuanto á los alimentos. Por último, el Papa Gregorio XV por su Bula «De elec- (DD) Cónclave, con llaye.