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= 481 = FILIBEECHI, REVOLUCIONARIO. El 12 de abril de 1865 trató de asesinar á Pio IX, pero le salió mal su plan. El se suicidó, el año 1872, Asi terminó con un crimen su larga ca- rrera de crímenes y de cobardes conspiraciones al servicio de Víctor Manuel, abuelo del actual Rey de Italia. MAGENTA, REVOLUCIONARIO. Gobernaba á Bolonia, arrebatada al Papa. Se despeñó de San Gotardo, y apenas se pudo recoger en el valle una octava parte de sus miembros des- trozados. Orros. El general Actis, uno de los más entu- siastas defensores de Víctor Manuel, y otros que con dicho general eran veinte y uno, todos al ser- vicio del Rey, fallecieron de muerte repentina en el corto espacio de tres meses, desde enero al fin de marzo del año 1866. Pudiera dudarse de esto si la historia no estuviera tan reciente; y ahí están todavía las familias interesadas para atestiguarlo. ¡Casualidad! ¡coincidencia! llamaba á eso el impío; pero nosotros no podemos menos de ver la mano de Dios y llamarle por su verdadero nombre ¡cas- tigo! Y castigo que enlutaba á muchísimas familias revolucionarias. ¡De cuántas lágrimas derramadas aun entre los suyos, fueron causa los hechos van- dálicos de la actual monarquía italiana! José MAZZINI, ÁLMA DE LA REVOLUCIÓN ITA- LIANA. Este hipócrita quiso engañar á Pío IX dicién- dole que se echase confiado en sus brazos, pero no pudo conseguirlo. Entonces se quitó la careta y manifestó cuáles habían sido sus perversas inten- ciones al escribir así al Papa en 1847. Con menti- 36