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a 48] ==> poco tiempo, erigiéndole en Roma una estatua con ofensa y protesta de León XII. Dime á quién alabas y te diré quién eres. BERNARDINO OCHÍN, HEREJE. Entre las apostasias de Prelados, sacerdotes y religiosos, que ocurrieron á la aparición del pro- testantismo en el siglo XVI, la de este desgraciado fué de las más escandalosas. La profundidad de sus conocimientos, su gran elocuencia y sus talen- tos, le dieron imperecedera fama. Los Prelados más ilustres, los principes y los hombres más emi- nentes de su época, buscaban su amistad. Las ciu- dades más célebres de Italia se disputaban la glo- ria de tenerle por predicador, y su nombre llegó á ser tan famoso que las gentes acudían de todas partes para conocerle y oirle. ¡Lástima grande que un hombre tan eminente se dejara caer desde la altura á que le elevaron sus talentos hasta el abismo de la apostasía, de la impiedad y del sa- crilegio, pues con todos se manchó, casándose en Ginebra como otro cualquier apóstata vulgar! Mu- rió en Moravia hacia el año 1600, abandonado de todo el mundo, como el más miserable de todos los hombres, según la gráfica expresión de los histo- riadores. (1) Algunos dicen que arrepentido. A A TO mo A PP mo MA Ñ E EH h n.' Ml $ $ E E 44 Ñ Ñ l SIGLO XVII ISABEL, REINA DE INGLATERRA. No hay palabras en diccionario ninguno que basten á execrar la memoria de este monstruo de deshonestidad, hija del crimen, de Enrique VIII y Ana Bolena, y Nerón de las mujeres por su sangui- (1) Barillas. Historia de las herejías,