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= 419= tiendo con juramento exterminar el cristianismo si le daban la victoria. Para esto despidió del ejérci- to'á todos los cristianos y se lanzó al campo con ciento treinta mil hombres. Constantino se había dispuesto á la lucha con la oración y el ayuno. El día 3 de julio del año 324 se encontraron los dos ejércitos en Andrinópolis. Licinio completa- mente'derrotado tuvo que apelar á la fuga, dejan- do muertos treinta y cuatro mil hombres, y corrien- do á encerrarse en Calcedonía, después de haber sido destruida su flota por la de Crispo en las aguas del Bósforo. Constantino, que le perseguía, libró una segunda batalla y alcanzó una nueva victoria haciendo tal carnicería en el ejército que sólo se salvaron tres mil. Licinio se refugió en Nicomedia, pero perseguido por Constantino tuvo que implo- rar clemencia del cristiano emperador. Este se la concedió y perdonó la vida, fijándole á Tesalónica para residencia. No obstante la magnanimidad de Constantino, deseando Licinio vengarse de él y recobrar el trono, entró en secretas inteligencias con los bárbaros, pero descubierta su traición fué estrangulado por orden de Constantino. ARRIO, PRESBÍTERO, HEREJE. Murió el año 336 de Ntro. Sr. Jesucristo). La justicia de Dios había exterminado la raza de los perseguidores de los cuerpos. El gran Constanti- no, elevado al imperio por la misericordia divina, había dado la paz á la Iglesia, sacando la cruz, sím- bolo de sus victorias, del fondo de las catacumbas, para fijarla en sus estandartes, y colocarla sobre la espada, sobre el Capitolio y sobre la corona impe- rial. Prohibió el culto pagano y exhortaba á sus súb- ditos 4“reconocer la verdad divina del cristianismo. a