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TO RITO IA RE IRE $8 = despojada también de todo murió miserable eo- mo él. El P. Florez, en su «Clave Historial» siglo I, dice lo siguiente, respecto de la Saltatriz, hija de Herodías, que huyendo de Francia á España llegó á Lérida, donde se abogó, pues danzando sobre el río helado, y rompiéndose el hielo de repente, se sumergió hasta el cuello, degollándola el hielo y dando algunos saltos la cabeza. CALÍGULA, EMPERADOR DE ROMA. (Murió año 41 de Ntro. Sr. Jesucristo.) Los crimenes y liviandades de este monstruo fueron tantos y tan grandes, que no puede contar- se su número, ni decirse cuál de ellos fué el mayor. Su lascivia le arrastró hasta vivir en incesto con su hermana Drusila: su soberbia no se satisfacia ni con los honores divinos, y su crueldad hizo mi- llares de víctimas. Calígula era un monstruo de crueldad y de im- pureza, pero su mayor empeño era hacerse pasar por Dios. Así es que obligaba á que se quitase la cabeza á las imágenes de los dioses para ponerlas otra que fuese su retrato, y se colocaba á veces él mismo entre las estatuas de Cástor y Polux para ser adorado como un Dios. No contento con esto y con llamarse el nuevo Júpiter, para lo cual se doraba la barba y empuñaba un rayo, aspiró á representar á todos los dioses y diosas del paga- nismo, llevando, ó un tridente como Neptuno, ó una lira como Apolo, ó un cadúceo como Mercurio. Quiso imitar á todos los dioses, menos á Jesu- cristo. Así vivió este bárbaro, que murió asesinado con su cuarta mujer Cesonia y con su hija, por Ca-

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