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=3M = La Santísima Virgen se dignó aceptar el humil- de trabajo que en honor suyo hiciera el Abogado, y apareciéndose á la hija del Comendador Agrelli, después de curarla de una grave enfermedad, la dijo: «Cada vez que desees alguna gracia, hazme tres novenas rezando los quince misterios del Rosario, Y otras tres novenas en acción de gracias.» Miles y miles de personas, no solamente en Europa, sino en América, Africa y hasta en la In- dia y China, consiguieron después por este medio innumerables dones y milagros, como así consta en documentos dignos de fe y en certificados mé- dicos, que pueden leerse en el periódico «11 Rosa- rio e la Nuova Pompeíi». Los misioneros, singularmente belgas y france- ses, la han hecho conocida en sus misiones con ex- traordinario fruto. Actualmente la Basílica, por disposición pontificia, está á cargo de los reveren- dos padres Dominicos, siendo uno de ellos eonsagra- do Obispo para el mayor esplendor de la Iglesia. Muchas son las naciones que han levantado templos con esta advocación. También nuestra Re- pública Argentina tiene un santuario de la Virgen de Pompeya, á cargo de los RR. PP. Capuchinos, en la capital Federal; y los fieles en las Súplicas y en las devotas peregrinaciones, han recibido ex- traordinarias gracias, y han leído después los pro- digios obrados por la Reina de Pompeya. (1) / (1) San Antonio de Sebo. En este pontificado se ha ex- tendido de un modo prodigioso la devoción á S. Antonio de Padua, y el taumaturgo ha obrado maravillas en todo el mundo, á favor de «El pan de los pobres». Pero el título de Sebo representa una curiosidad y queremos darla á conocer á nuestros lectores. En esta ciudad de Buenos Aires, por