BCCPAM000R09-1-33000000000000

82 EL PROBLEMA RELIGIOSO tes en esa contradictoria condición humana. Pero el problema humano que se sustrae a la averiguación científica, queda claro ante la luz de la fe. La crea- ción de las cosas está repartida en dos categorías de seres; los unos amasados en polvo, y los otros libres de materias: espirituales. La materia y el pol- vo gravitan hacia la nada de que fueron sacados; los espíritus como vienen de Dios, a Dios quieren vol- ver. Ved la contradicción antagónica y lucha del hom- bre formado en materia y espíritu, de alma y cuerpo, El hombre gravita entre dos abismos: el de la nada y el de Dios. Lo bajo y lo grande, lo ínfimo y lo ex- celso, tierra y cielo, polvo y alma. Ved ahí al hombre. Faltaba en la creación de los cinco primeros días un sello de unidad. Por arriba volaban los espíritus; en la tierra se agitaban la materia y lo sensible. Dios quiso completar su obra creadora encerrando la creación toda en este «cofre divino», que es el hom- bre, sellando con este ser humano las dos creacio- nes: la de la materia y la del espíritu. —Decidme cómo fué creado ese compuesto humano. —Dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra ima- gen y semejanza, y formó del barro preexistente un cuerpo compendio de todas las hermosuras, y sobre aquel cuerpo material sopló una respiración de vida y dió a la materia corporal un espíritu inmortal; spi- raculum vitae. El alma es síntesis de todas las belle- zas y resumen de todas las gracias, porque Dios al infundirla en el cuerpo del hombre la hizo inmacu- lada y llena de gracias. «Factus est homo in animam

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz