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CAPITULO I LA CREACION DEL HOMBRE La vida y el primer proto- plasma o substractum material donde pueda desarrollarse, tie- ne que haber sido fabricado ex profeso. André. —Ahora deseo vivamente conocer el origen del hombre por que lo primero que nos debe interesar somos nosotros mismos... ¿Qué hay sobre esto? —¿Qué soy yo? ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? Realmente son estas unas preguntas de inte- rés general, del interés más profundo, pero que nos desconciertan. Es tema candente y quiero descorre- ros un poco el velo del misterio abriéndoos una ventana en el muro del porvenir, Si el origen. de este grano de polvo, que es la tie- rra, es tan magnífico y sublime por serlo el mismo Dios, no puede ser de menor categoría el origen del hombre. Si el dosel de gloria de ese firmamento cuajado de estrellas es Dios, si lo pequeño y gran- de de El viene ¿mo provendrá igualmente de Dios el hombre que es a un mismo tiempo lo grande y lo pequeño? Digo que el hombre es grande y pequeño porque tiene de todo. Es grande porque ese dosel Origen hombre. del