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ESPIRITUALIDAD DEL ALMA 105 que al evocarlos con el recuerdo, acuden y dicen: «aquí estamos». No se perdieron de vuestra memo- ria, están en vosotros. ¿Pero cómo están? ¿Quién los sustenta? ¿Qué misterio es ese que volvéis vein- te, treinta años atrás y pasáis lista a los aconteci- mientos que fueron? Decidme en qué página bizarra de vuestro ser queda todo eso escrito. ¿En la mate- ria? No puede ser. De lo que teníamos hace diez años, no hay ni una partícula en nosotros. La car- ne se renueva constantemente y en ella no puede quedar escrito lo que ahora releemos de la página vieja. Entonces ¿cómo lo recordamos? ¿cómo no se fué con la materia todo aquello, si el hombre no es más que materia? Es que hay en el hombre algo que no es materia que perdura a través de los años: el alma con su entendimiento, memoria y voluntad. Todo aquello que pasó se escribió en la conciencia, en la parte espiritual, porque la demos- tración es clara: si todo lo material se renueva en nosotros periódicamente, y, no obstante, hay algo per- manente, es que eso que permanece no es material, No basta que me contesten: los recuerdos van y vie- nen como la materia. Si van y vienen, lo que va no permanece, y lo que permanece no se va, y es evi- dente que aquellos recuerdos quedan... (1) —La observación es exacta: yo sé que hace diez (1) Según Flourens se renuevan hasta los tejidos óseos y en opinión de Moleschott esa renovación total se hace en treinta días. (Circulación de la vida). Otros suponen que se hace al cabo de 4, 6 o 8 años. Renovación y permanencia.

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