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contenido definitive... De suerte que ni en el San- tísimo Sacramento se le puede ver cómo está en el Cielo ¿n propria specie (1). Peroel padre Urba- no añade que «le sería muy fácil calificar esa pro- posición de próxima al error y a la herejía» y concluye diciendo: «No puede hacerse tal hipó- tesis gloriosa ». Una cosa es que no se admita la hipótesis, otra muy distinta que sea próxima a herejía. Las citas que trae el padre Urbano para apoyar su aserto no dicen nada sobre el particular. Nos parece que por esta hipótesis (no afirmación) que presenta el señor Camporredondo, no merece el trato que le da el padre Urbano (2). Se nos an- toja que el señor Camporredondo y Santo Tomás están enteramente de acuerdo, porque éste como aquél cita la hipótesis con las palabras in hoc sensu quidam dicunt quod est propria species corporis Christi... Por lo mismo que es difícil tener el mismo cuerpo glorioso delante y ver visiones dolorosas, dice el señor Camporredondo que es difícil se rea- lice la hipótesis, con lo que dice bastante para que se entienda en qué sentido aduce la discutida hi- pótesis que tanto escandaliza al padre Urbano. A. nosotros no nos causa tal escándalo, aunque no (1) Summ., 3 pars., q. LXXVI, a. 8. (2) Véase su libro donde trata con gran desconsidera- ción al señor Camporredondo.