BCCPAM000R09-1-32000000000000

E teniendo tantos argumentos que hacen evidente mente creíble nuestra fe, habiendo llegado al com- pleto desarrollo el árbol del cristianismo, parece que no se requería el riego de nuevos dones exte- riores o gracias gratis datas; pero Jesucristo, que sabe el barro de que estamos formados y la extre- ma flaqueza del hombre, hace estos actos de pre- sencia en todos los siglos, para llamarnos la aten- ción sobre su amor. Nosotros al notar su realidad deberíamos exclamar con Santo Tomás: Domi- ne Deus et Deus meus. Es necesario crear al rede- dor del madero angustioso una oficina de compa- sión. . Pensemos que nuestro Señor quiere ser honra- do en su compasión, consagrando a su culto espe- cial siquiera un viernes del mes, que deberá ser el último viernes, según las intenciones comunicadas a un alma santa. Sí; la devoción de los últimos viernes de cada mes debe cundir como homenaje a los prodigios que Jesús multiplica en la iglesia de Limpias. El dolor no sólo merece ser compa- decido, también merece ser adorado... Un culto público dedicado a los últimos viernes de los doce meses del año será recibido por el Cristo amado como una correspondencia de gratitud a los bene- ficios actuales. La vida cristiana y aun la devota, anda rezagada y desarticulada por el vivir actual. La humanidad avanza a saltos y devora etapas. Ojalá que los prodigios de Limpias sean una

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz